Antimosquitos
Los mosquitos tal vez son una de las plagas más molestas y peligrosas que hay para el ser humano. Molesta en el primer mundo donde con cierta facilidad se pueden conseguir métodos antimosquitos y peligrosa en el tercer mundo donde los mosquitos son uno de los vectores de una docena de enfermedades de cierta gravedad hasta causar la muerte en un par de días.
Por poner un ejemplo España catalogó de erradicado el paludismo gracias al secado categórico de pantanos en todo su territorio para evitar la reproducción de los mosquitos anófeles, que transmitían la enfermedad.
Existen varios maneras de prevenir las picaduras de los mosquitos. La más sencilla y barata es impedir que entren en contacto con la piel. Esto se puede hacer en una casa poniendo mosquiteras, pero resulta imposible para salir al exterior. Esta es la opción más duradera, económica y respetuosa con el medio ambiente que hay en el mercado.
En segundo lugar podemos hablar de aquellos mata insectos que producen una luz ultravioleta que atrae a todos los insectos y los quema o deja pegados en un adhesivo. Esta forma de eliminar a los molestos mosquitos es muy utilizada en sitios abiertos, como terrazas de bares y restaurantes. Su efectividad es alta, aunque mata de forma indiscriminada a todos los insectos, que se sienten atraídos por la luz UV.
Recientemente han llegado al mercado los antimosquitos por ultrasonidos. La teoría detrás de ellos es que emiten una longitud de onda que el oído humano casi no puede percibir y que resulta molesta para los mosquitos y que por ellos se alejan de la fuente de emisión. La organización FACUA ( Federación de Asociaciones de Consumidores y Usuarios de Andalucía, que actualmente actúa a nivel nacional en España) ha pedido la retirada del mercado de este tipo de antimosquitos puesto que numerosos estudios demuestran la inefectividad de los mismos.
Finalmente y la gama más completa de antimosquitos la componen los químicos.
Por químicos nos referimos a todos aquellos que emiten una sustancia que interfiere con el olfato de los mosquitos. Esta interacción puede atraer al mosquito hacia una trampa o bien puede ser desagradable para el mosquito y ahuyentarlo. Estos antimosquitos solo funcionan a corta distancia (unos 4 cm.) y evitan que el mosquito se pose o se acerque al olor desagradable.
Los antimosquitos químicos engloban tanto a los que difunden una sustancia producida por algún organismo de forma natural, como el aceite de citronela o el lianol, de baja eficacia puesto que se evaporar rápidamente. O por el contrario es xenobiótica, producida de forma artificial, como el DEET, el más eficaz de todos los químicos.
El Autan es un antimosquitos químico potente muy común en los campamentos de verano
En ambos casos estas sustancias son captadas por el mosquito y muchas veces también por el ser humano que se las rocía por encima o las difunde en su ambiente cercano. Según la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) las pulseras antimosquitos no han demostrado tener un efecto más allá del área de efecto que ya hemos comentado 4 cm.
Además de los métodos activos, el mosquito tiene varios depredadores naturales. Como las libélulas, los murciélagos y algunas especies pequeñas de pájaros, por lo que favorecer a estos depredadores en el jardín o huerto puede ser una forma ecológicamente equilibrada de tenerlos a raya.
