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Setas de verano

Publicado por Ramón Contreras

La mayoría de la gente considera que las setas son un producto del otoño y no van desencaminados. Sin embargo, existen algunas de ellas y muy apreciadas que pueden encontrarse durante el verano. Los hongos tienen una relación muy estrecha con el agua. La falta de pared celular hace que pierdan gran cantidad de agua, por lo que sus cuerpos fructíferos (las setas) solo pueden desarrollarse con gran cantidad de humedad, después de las lluvias. Es por eso que el verano, la época seca por definición, no suele asociarse con las setas y la cocina con ellas es más típica de primavera y otoño.

Sin embargo, las setas, como todos los seres vivos han intentado adaptarse a todos los ambientes, incluso los que le son más desfavorables. Existen setas que tienen unos requerimientos hídricos muy bajos y pueden dar su seta con tan solo las lluvias ocasionales de los meses de verano. De algunas de ellas ya hemos hablado en Laguia2000, como el rebozuelo (Cantharellus cibarius) , algunas especies del género boletus. Del que hemos comentado ya lo codiciadas que son y la gran calidad que tienen aquí, aquí o aquí. En este grupo encontramos setas de verano como el “boleto de verano” cuyo nombre científico es Boletus aestivales, o el Boletus aereus conocido como hongo negro. Ambos salen con las grandes tormentas de verano, tras una o dos semanas después de las fuertes lluvias. Como todos los Boletus son muy apreciados y las especies veraniegas son ricas en aromas y sabores. Como en el caso de las anteriores que ya su propio nombre indica que son típicas del verano, encontramos la trufa de verano, Tuber aestivus. La calidad organoléptica de la trufa de verano es menor en aromas y sabores que la de inverno, cosa que no pasa con los boletus de verano. No obstante, la trufa de verano es igualmente apreciada y algo más asequible para todos los bolsillos. La Amanita caesarea es también típica de los meses más cálidos, su forma de huevo cuando está creciendo es común a todo el género, pero su color naranja y amarillo cuando está completamente desarrollada la hacen muy reconocible y diferenciable de otras Amanitas peligrosas, que además no se encuentran en ese tiempo. Otro que tal vez sorprenda entre los hongos veraniegos es el níscalo, si junio es lluvioso puede salir a principios de agosto en el hemisferio boreal, puesto que completan su ciclo en 40 días. Todas estas setas que hemos nombrado son muy apreciadas y en parte necesitan el calor veraniego para poder desarrollarse.

Todas estas setas aparecerán en los meses de verano en zonas concretas, no aparecerán en el desierto. Son todas de zonas boscosas, que pueden retener la humedad y tienen el suelo bien sombreado y eventualmente pueden aparecer en prados de zonas de montaña. En estas condiciones de humedad en el suelo y buen ambiente exterior surgirán las setas para enviar las esporas al aire seco que las dispersará y hasta la siguiente época húmeda no empezarán a desarrollarse, dándole mucho tiempo a la espora para alejarse de su progenitor.