Intoxicación por setas: Amanita phalloides
Cada año durante la temporada de consumo de setas ocurren muertes debido a la mala identificación y el consumo de setas nocivas. Es por este motivo que siempre hay que estar muy seguro de la correcta clasificación de las setas que se van a consumir, para eso lo mejor es preguntar o ser acompañado por un experto micólogo para ir a recoger los apreciados hongos al campo o a la montaña. Desde aquí y para ayudar a los recolectores hablaremos hoy de Amanita phalloides, una seta que cada año se cobra alguna muerte.
Filogenia e historia evolutiva: esta seta que en ocasiones se llama oronja verde, oronja mortal, cicuta verde, canaleja o hongo de la muerte (en Argentina) pertenece al género Amanita, grupo que comparte con Amanita muscaria, una seta tóxica, o Amanita caesarea, una de gran reconocimiento gastronómico. Amanita phalloides es la especie tipo de la sección phalloideae, un taxón por debajo de género que se considera en géneros con un gran número de especies. En la sección phalloideae se recogen todas las amanitas de gran toxicidad, las mortales. Las 600 especies que forman el género se incluyen en la familia taxonómica Amanitaceae, dentro del Orden Agaricales (taxón al que también pertenecen los champiñones, por ejemplo). A su vez se clasifican en la Clase Agaricomycetes, incluida en la División Basidiomycota del Reino Fungi.
Descripción: el sombrero de esta seta es grande (de hasta 15 cm) de color verde oliva que se degrada a canela. El color es más oscuro en el centro y casi blanco en el perímetro del sombrero. Los ejemplares jóvenes tienen el sombrero o píleo semicircular, que se va aplanando a los pocos días. En su interior el himenio es laminar, y las láminas son libres. El pie, blanco, presenta un anillo que pueden perder a los 2 o 3 días y volva, en la base del pie. Pueden verde escamas verdosas en el pie. Las esporas son blancas. Su carne es blanca y desprende un olor de rosas.
Distribución y hábitat: se asocia a bosques de frondosas y en menor medida coníferas desde nivel del mar hasta la montaña. Prefiere los suelos arenosos y fructifica en verano y otoño. Se encuentra en Europa, América, África y Oceanía, donde se cree que ha sido introducida. Originaria del continente Euroasiático su gran capacidad para asociarse a un número de especies arbóreas diferentes ha permitido que se disperse a todo el mundo con bastante facilidad.
Interacción con el ser humano: Amanita phalloides es una especie mortal. Cuenta con dos tipos de toxinas, amatoxinas y falotoxinas. En el primer grupo A. phalloides presenta 8 moléculas heterociclicas de aspecto similar. Por otra parte las falotoxinas son pequeños péptidos. En conjunto impiden que la ARN polimerasa II funcione, evitando la generación de ARN mensajero a partir de ADN. Como no se generan nuevas proteínas, ésto supone la muerte celular a las pocas horas. La ingesta de tan solo 20 g de esta seta puede causar malestar, vómitos y diarrea entre 6 y 48 horas después de su consumo. La muerte deviene entre una y dos semanas después de la comida. La muerte es causada por lesión en hígado y riñón. El fallo hepático desemboca en ictericia que puede usarse para determinar la causa de la dolencia. La mejor opción ante una posible contaminación es el lavado gástrico con carbón activo. Se puede confundir con una docena de especies, entre ellas Volvariella volvacea, una seta china.
Prevención y educación: La mejor forma de prevenir la intoxicación por Amanita phalloides es la educación. Los recolectores de setas deben estar bien informados sobre las características de esta seta mortal y cómo distinguirla de otras especies comestibles. Los niños también deben ser educados sobre los peligros de consumir setas silvestres sin la supervisión de un adulto. En muchos países, existen programas de educación y formación para recolectores de setas que incluyen información sobre la identificación de setas, las especies peligrosas y las medidas de seguridad a seguir al recolectar y consumir setas silvestres.
Tratamiento y pronóstico: En caso de intoxicación por Amanita phalloides, es crucial buscar atención médica inmediata. El tratamiento puede incluir medidas de soporte como la rehidratación y el control de los síntomas, así como el uso de medicamentos específicos para contrarrestar los efectos de las toxinas. El pronóstico puede variar dependiendo de la cantidad de setas consumidas y el tiempo transcurrido desde la ingestión hasta el inicio del tratamiento. En algunos casos, puede ser necesario un trasplante de hígado.
Investigación y estudios científicos: A pesar de su peligrosidad, la Amanita phalloides ha sido objeto de numerosos estudios científicos. Los investigadores han estudiado sus toxinas y su mecanismo de acción con el objetivo de desarrollar tratamientos más efectivos para la intoxicación. Además, se están realizando investigaciones para explorar el potencial de las toxinas de esta seta en la lucha contra el cáncer y otras enfermedades.