La desaparición de los neandertales, ¿guerra o sexo?
¿De dónde venimos? ¿A dónde vamos? Tal vez estas sean las preguntas filosóficas más profundas que una persona puede hacerse. Gracias a la ciencia cada vez estamos más cerca de, si no contestar a estas preguntas, poder dar una respuesta lo más parecida a la verdad que se puede alcanzar. En los últimos años, se ha disipado el velo que cubría parte del pasado de la especie humana actual, los Homo sapiens. El descubrimiento de los denisovaros y la profundización en la vida de los neandertales nos ha mostrado una parte del ¿de dónde venimos?
La entrada de genes de neandertal en H. sapiens nos dio el 2% de nuestro genoma
Ambas especies de homínidos, denisovaros y neandertales, son nuestros parientes más cercanos y extintos. La razón de esta extinción todavía no está clara y nos interesa por razones más que obvias, si se extinguieron después de cientos de miles de años con nosotros, ¿qué les pasó? ¿Nos puede pasar a nosotros? ¿Cómo lo evitamos? Pero, como comprenderás saber por qué un grupo de humanos se extinguió hace tanto tiempo es complicado. Recientemente, las técnicas de extracción de ADN permiten recuperar el material genético de fósiles de esa época (y tal vez en el futuro nos permita recuperar ADN de fósiles todavía más antiguo, como de dinosaurios). De hecho, la recuperación de este ADN y tejer la historia de esos grupos humanos con el nuestro es lo que le dio el premio Nobel de medicina 2022 a Svante Pääbo (lee más de por qué aquí).
Una de las hipótesis que más abundó durante el siglo XX era que fueron eliminados en guerras por el territorio por nuestros antepasados. El siglo XX, uno de los siglos más belicistas a nivel mundial, no es extraño que se decantase por esas teorías. Sin embargo, a principios del siglo XXI se ha descubierto que el 2% del genoma de los humanos actuales proviene de los neandertales. Esto indica que había cierto entrecruzamiento entre ambos grupos. A esto hay que sumar que se han encontrado individuos de las dos especies en as mismas fosas, aunque no se sabe si convivieron o simplemente fueron enterrados en el mismo sitio.
Estos estudios de ADN han mostrado que no solo de guerras muere el hombre, sino que puede haber sido el mestizaje, lo que llevara a los neandertales a integrarse en las sociedades de Homo sapiens. Pero el estudio de los resultados muestra algo más, algo curioso. De los 32 genomas de neandertales que se han secuenciado hasta la fecha, ninguno contiene ningún gen de humano actual. Esto puede indicar dos cosas. Una, que la muestra de individuos analizados no es lo suficientemente grande o representativa de los neandertales como para ver la entrada de genes de H. sapiens en la especie. Por otro lado, esto podría indicar que el cruce solo era fértil en una dirección. Que mientras la entrada de genes de neandertal a sapiens fue posible por la incorporación de varones fértiles neandertales en grupos sapiens, las mujeres neandertales no podían tener hijos de sapiens. Esto es muy interesante, pues es uno de los sistemas de especiación Mecanismos de aislamiento reproductivo (diferenciación entre especies) más comunes en la naturaleza. Nos estaría indicando que realmente estas especies vivieron separadas y que no fue más que un golpe del destino evolutivo, lo que nos llevó a poder tener genes neandertales.