Porqué los carnívoros no deberían ser sometidos a una dieta vegana
Una corriente de pensamiento ha llevado a muchos seres humanos a declinar el consumo de carne como fuente de su energía y materia. Cada cierto tiempo salen noticias sobre menores de edad con problemas de malnutrición debido a la dieta obligada por unos padres o algo incluso peor mascotas, perros y gatos, animales carnívoros que son obligados a realizar una dieta en contra de su naturaleza por derecho y gracia de sus dueños. Parándonos a pensar hay que recurrir a la biología para entender porque estos animales son carnívoros y cuáles son las consecuencias de una dieta herbívora o vegetariana, o simplemente por qué no escogen los veganos mascotas que se ajusten a sus ideales de vida para no tener que forzar a un animal a ir en contra de sus necesidades naturales.
Cuando pensamos en carnívoros que son también mascotas pensamos en animales mamíferos del grupo taxonómico de los carnívoros, aunque también puede hacer referencia a otros depredadores de otros clados, como serpientes, tritones, ranas o incluso aves. Cada ecosistema tiene una serie de especies adaptadas exclusivamente a comer carne, obtienen el 100% de sus necesidades de materia orgánica a base de la eliminación de otros animales herbívoros u omnívoros. Los carnívoros son importantes en los ecosistemas como sistema de control poblacional de los herbívoros y también para eliminar los cadáveres de los animales que van muriendo en la naturaleza.
Para ello estos carnívoros han adaptado su aparato digestivo a tal tipo de alimentación, de tal manera que digieren con gran eficacia el alimento obtenido de esta fuente de alimentación y no de otra. Muchos carnívoros no son realmente cazadores si no que se dedican a comer carroña y por eso son fundamentales en todo ecosistema.
Sin contar con el aparato masticador, los dientes, muchos animales están adaptados a la ingesta de carne. El sistema digestivo, la capacidad de absorción de cada tipo de molécula o los enzimas secretados por el hígado y el páncreas están adaptados al consumo de carne, que en comparación con los vegetales es fácilmente digerible. En los carnívoros el estómago es la mayor parte del sistema digestivo (entre el 60 y el 70%), en comparación con los largos intestinos de los herbívoros.
En los herbívoros el intestino grueso está más desarrollado y permite la degradación de moléculas complejas de origen vegetal, en los carnívoros esta parte del sistema digestivo es más corta, no cuenta con las baterías que producen las enzimas para la degradación de las fibras vegetales (que requieren la intervención de las bacterias y posteriormente la digestión por parte del herbívoro de las moléculas resultantes) y el colon tan solo tiene funciones de absorción de sales y agua. En los carnívoros el intestino delgado y el corto tienen aproximadamente el mismo diámetro. El tracto digestivo en los animales que consumen tan solo carne es más corto que en vertebrados, siendo tan solo unas 3 veces más largo que sus torsos, esto es debido en parte a que la carne se descompone más rápidamente que los vegetales y por lo tanto su consumo debe ser mucho más rápido.