Coronavirus Sars-Cov-2 ¿alarmismo o peligro real?
En la crisis del COVID-19 están surgiendo ya corrientes de opinión sobre lo que está pasando y como se está llevando a cabo la contención o lucha contra la propagación del virus que vino de China. Al bloqueo Chino se ha unido el bloqueo completo de Italia y en España ya se han cerrado colegios y universidades para prevenir la propagación. Otras comunidades e instituciones se preparan por todo el mundo para el cierre de su actividad de forma preventiva. ¿es todo esto alarmista o es un protocolo de seguridad sanitaria correcto?
Por un lado tenemos que los expertos nos han dicho que tiene una tasa de letalidad muy baja. Las poblaciones más afectadas son como siempre los más desfavorecidos. Los inmunodeprimidos, los mayores de 65 años y la gente con afecciones cardíacas. Esta gente, que resulta que es una pequeñísima parte de la población son los que más probablemente morirían si cogiesen la enfermedad. Además de este sector existe la posibilidad de morir si eres un adulto sano, solo que es más baja.
Se están oyendo muchas voces que critican los cierres y cuarentenas. La «baja» letalidad de este virus lo ha vuelto inofensivo a ojos de un sector poblacional (normalmente jóvenes y adultos sanos) que no ven el riesgo para la sociedad del contagio de un virus que potencialmente puede acabar con los mayores de 65 años. Es verdad que también están en riesgo de morir a causa de una gripe, pero la diferencia estriba en que hay campañas de prevención anuales contra la gripe, mientras que es la primera vez que la humanidad se enfrenta a la propagación mundial del coronavirus SarsCoV-2.
Yendo a números más técnicos, la gripe común tiene un valor de contagio de 1’3, es decir, una persona propaga el virus a 1’3 personas. Unos años atrás, en 2009, una nueva variedad de gripe denominada H1N1 hizo saltar las alarmas con un valor de contagio de 1’5. A día de hoy el H1N1 forma parte de la gripe común (haciendo subir su valor de contagio). El coronavirus que preocupa a la humanidad en la actualidad tiene el doble de potencialidad de contagio, es decir, cada infectado puede contagiar a unas tres personas. La infección se propagaría el doble de rápido pero el desenlace es muy diferente.
Por una parte la gripe causa la muerte de 20 persona de cada 100.000. Por otra parte, en los datos publicados por un grupo de investigación chino en la New England Journal of Medicine, una prestigiosa revista médica, el Sars-Covid-2 causa la muerte a 14.000 personas de esas hipotéticas 100.000. Evidentmente estos datos tienen que ser actualizados a medida que se conozcan más casos de infectados por coronavirus. Sin embargo, la comparación ya deja de manifiesto la diferencia entre uno y otro. Si a esto se añade la mayor tasa de propagación vemos porqué las autoridades han entrado en estado de alarma y cerrado todo tipo de centros.
Para acabar hay que añadir que no solo por la letalidad o la propagación este virus podría ser un problema. El colapso de las instituciones sanitarias (debido a su rápida propagación) es un problema que las autoridades también tienen que tener en cuenta y sin duda uno de los motivos para promover la cuarentena en casa.
En definitiva, es posible que los números del Sars-CoV-2 no seas tan impresionantes ahora mismo como los de la gripe en cuanto a número de muertes, pero eso es precisamente lo que se está tratando de evitar con la cuarentena y la prevención.