Cómo actúa la cafeína
La cafeína es uno de los estimulantes más extendidos alrededor del globo. Productos como el café o los refrescos de cola y otras bebidas energéticas llevan cafeína, pero no solo estos productos, sino que también contienen este ingrediente muchos medicamentos cuyo objetivo es mantener activo al paciente. Por ejemplo la mayoría de medicamentos para aliviar los síntomas del resfriado llevan este estimulante para combatir el cansancio general que se relaciona con la enfermedad. Otros medicamentos destinados a aliviar el dolor y la inflamación llevan también cafeína para evitar el aletargamiento general que puede inducir un medicamento de este tipo.
Sus efectos reconocidos son aumento de la sensación de alerta, disminución de la somnolencia y aumento de la diuresis; estando en discusión si puede o no ayudar a la memoria. En fin, la cafeína y sus derivados y moléculas afines como la teína (del té), la guaranina (de la fruta de la guaraná) o la mateina (de la hierba mate), son compuestos ampliamente utilizado. Para hacernos una idea, en EE. UU. El 90% de la población toma algún compuesto con cafeína todos los días.
La guaranina tiene una estructura molecular similar a la cafeína y tiene los mismos efectos sobre los receptores de adenosina.
La cafeína, es un alcaloide, como otras drogas psicoactivas, pero que crea una abstinencia mucho menor. La molécula de la cafeína cuenta con 8 carbonos, 10 hidrógenos, 4 nitrógenos y 2 moléculas de oxígeno. Químicamente se le conoce por el nombre 1,3,7-trimetil- 1H-purina- 2,6(3H,7H)-diona 1,3,7-trimetilxantina. Su estructura está formada por una purina (un compuesto orgánico heterocíclico, formado por dos anillos de 6 y 5 átomos respectivamente entre los que se encuentran los 4 nitrógenos).
Estos compuestos que hemos nombrado anteriormente actúan como antagonistas de los receptores de adenosina (otra molécula en cuya estructura se encuentra una purina). La adenosina se sintetiza en el cuerpo mediante la degradación de proteínas. Puedes leer más sobre la adenosina y sus efectos neurprotectores en el sistema nervioso en su artículo aquí. En el sistema nervioso causa una atenuación de la actividad (que se traduce en somnolencia) y también aumenta el sueño tanto el de movimiento ocular rápido como el que no, el sueño profundo y el ligero.
Como la cafeína posee una estructura muy similar a la adenosina, ambas están basadas en una purina, es capaz de unirse a los receptores celulares destinados a ésta molécula. Sin embargo, la cafeína no presenta el azúcar de la adenosina (una ribosa), por lo que aunque se une al receptor de la membrana no dispara la actividad intracelular del receptor, se dice que es un antagonista competidor. En consecuencia la cantidad de moléculas de adenosina que se unen a sus receptores disminuyen previniendo la aparición de los efectos de la adenosina, la somnolencia.
Así mismo la cafeína tiene otros efectos en el metabolismo de la adenosina. Se ha observado que también inhibe la degradación de AMP cíclico, un compuesto derivado de la adenosina que actúa como mensajero secundario en multitud de señales celulares como la regulación del metabolismo de la glucosa, el glucógeno o los lípidos. esto es devido a que interfiere directamente con la enzima que forma este compuesto, la adenilato ciclasa.