Animales gregarios: las manadas

Las manadas son grupos de individuos de la misma especie que por motivos de supervivencia viven juntos. La asociación con otros individuos es un comportamiento muy frecuente y extendido en la naturaleza. Algunas especies tan solo forman manadas durante ciertos periodos de tiempo, se reúnen durante la época del año del apareamiento y la cría.

Muchos animales son gregarios de forma instintiva, la mayoría de los primates viven en comunidades familiares. Mientras que otras especies son completamente solitarias, como los tigres, que tan solo se encuentran con otros tigres para apararse o luchar por el territorio. El comportamiento gregario no solo se da en los mamíferos, aunque en estos se da con muchísima frecuencia. Las mariposas monarca se juntan en grandes manadas para migrar en el continente americano de norte a sur cada año en grupos de millones de individuos.

Quién las forma: Las manadas pueden estar compuestas por hembras y sus crias o por ambos sexos. Como en el caso de los leones, que tan solo un macho adulto está presente en cada manada, mientras que el número de hembras puede llegar hasta más de una docena. En otras especies los machos suelen ser solitarios, como es el caso de los ciervos o los elefantes, mientras que las hembras forman grupos sociales emparentadas por lazos familiares, como en el caso de los elefantes, o no, como los ciervos que solo se reúnen durante la época de apareamiento.

Porqué se forman: El motivo de la formación de grupos sociales, como las manadas, es la supervivencia, bien porque gracias a las manadas pueden cazar presas más grandes, como en el caso de los lobos, o bien porque cuantos más ojos para ver depredadores más posibilidades hay de sobrevivir, como en el caso de los ñus. A veces las manadas y la supervivencia es simplemente una cuestión de matemáticas, cuantos más seamos menos posibilidades hay de que me cacen a mí.

La mayoría de herbívoros forman manadas para defenderse de los depredadores.

Quién manda en la manada: Los animales que han de realizar migraciones, en general, forman manadas de forma transitoria para mejorar sus posibilidades de no ser atacado o para no perderse por el camino. Estos grupos temporales no suelen poseer una estructura tan organizada como las manadas que son estables durante todo el año. En este tipo de manadas, como las que se forman durante la migración de las cebras, en las que no existe un individuo dominante, las decisiones suelen tomarse en consentimiento general. Como por ejemplo siempre proteger a un miembro de la manada herido. Los búfalos ante el peligro, forman un círculo con los adultos en el exterior y las crías en el interior para defenderlas, sin necesidad de un individuo dominante supervisando.

Las manadas estables suelen estar formadas por individuos con relaciones de parentesco. En ellas existe un primarca, matriarca o patriarca, que toma las decisiones sobre a donde hay que ir, cuando y en el caso de los machos suele tener preferencia a la hora de aparearse con todas las hembras. Las manadas de lobos tienen una pareja dominante, comúnmente denominada pareja alfa, que con los encargados de dirigir las cazas y tienen preferencia a la hora de comer.