Biología

Colibríes y magia negra

Publicado por Ramón Contreras

Los colibríes son aves magníficas, que atraen miradas y leyendas por igual. En la cultura mexica son representación tanto del amor como de la guerra. Estas aves son las más pequeñas del mundo, la especie más pequeña pesa apenas 2,5 gramos. A parte de eso se caracterizan por su vuelo constante, su capacidad de quedarse volando sin avanzar y sus largos picos. Al final, todo está relacionado. Su alimentación se basa en néctar de flores exclusivamente, por lo que tienen un pico largo para pinchar las flores y sorber el néctar de su interior. Para ello, han de permanecer quietas mientras extraen el néctar y por eso han desarrollado esta habilidad única de permanecer en el aire sin avanzar (ningún otro ave es capaz de permanecer tanto tiempo como ellos sin moverse). Para conseguir esto baten sus diminutas alas más de 80 veces por segundo, lo que les confiere una gran estabilidad en vuelo y unas dotes acrobáticas extremas.

Muchas especies de colibries tienen una relación exclusiva con determinadas especies de flores. De esta manera las flores se aseguran que todo el polen que lleva el colibrí sea útil para ellas

Sin embargo, no todo es tan maravilloso. Ese tipo de vuelo requiere una gran energía y por ello han de alimentarse continuamente. El néctar es casi azúcar puro para obtener gran energía instantánea y han de tomarla constantemente. Se calcula que un colibrí que pasa más de 10 minutos sin comer entra en un estado de torpor cercano a la muerte. Y es que eso mismo les pasa por las noches. Durante las horas sin luz los colibríes no pueden comer y entran en un letargo similar al de los osos en invierno, solo que lo hacen cada noche. Durante este periodo sus pulsaciones bajan y su respiración se ralentiza. Se quedan estirados como si estuvieran muertos. A la mañana siguiente cuando el sol calienta sus menudos cuerpos se reactivan y reemprenden su frenética búsqueda de alimento. Esta curiosa forma de pasar las horas sin alimento fue lo que llevó a los habitantes del continente americano a ver en los colibríes emisarios del mundo de los muertos. Su resurrección diaria podía llevar y traer mensajes de un mundo al otro. Como comprenderás, necesitan asegurarse una provisión de flores con néctar importante para vivir. Es por esto que son extremadamente territoriales y violentos contra los intrusos, les va la vida en ello cada 10 minutos. Su ferocidad es lo que hizo que los mexicas lo relacionaran con el dios de la guerra, Huitzilopochtli, que se traduce como el colibrí zurdo.

Estas cualidades de pasar al mundo de los muertos por las noches o su ferocidad y pasión han hecho que la santería y la magia negra los usen para sus encantamientos y talismanes. Si de las 300 especies de colibrí que hay en América tenemos en cuenta que unas 50 están en peligro de extinción por pérdida de hábitat, las prácticas mágicas no ayudan nada a las poblaciones mermadas de estas escurridizas aves. Si tenemos en cuenta que la aparición de un colibrí es en estas creencias un augurio de buena suerte, ¿no sería conveniente mimarlos y ayudar a que permanezcan en nuestro entorno más que cazarlos para hacer amuletos?