Biología
Inicio Botánica Mandrágora, la planta cuyo grito causaba la muerte

Mandrágora, la planta cuyo grito causaba la muerte

Publicado por Ramón Contreras

La mandrágora es una de las plantas que ha formado parte de la magia y el esoterismo en la cultura humana desde el principio de los tiempos. Aunque cabe decir que también se ha utilizado en medicina tradicional con mayor o menor acierto.

Filogenia e historia evolutiva: existen 3 especies dentro del género taxonómico Mandragora. M. officinarum, M. autumnalis y M. acaulis, estas tres especies son anatómicamente similares y es fácil confundirlas en la naturaleza. De hecho, muchos autores las tratan como subespecies adaptadas a climas cálidos o fríos. Este género es el miembro exclusivo de la tribu Mandragoreae, que se incluye dentro de la Familia Solanaceae, las solanáceas, taxón que comparte con el pimiento, la patata o el tomate, por ejemplo. Este importante grupo de plantas pertenece a su ve al orden Solanales de la subclase Asteridae, dentro de la Clase Magnoliopsida de la División Magnoliophyta.

Descripción: las características diferenciadoras de las especies de mandrágoras no está clara en los libros de botánica. Las mandrágoras son plantas perennes, de bajo porte, uso 30 cm máximo. Si bien su raíz puede extenderse hasta un metro de profundidad. Sus hojas son grandes, con el margen ondulado y con nerviación muy marcada. Tienen un color verde intenso y están recubiertas de un vello fino. Sus tallos son muy cortos, casi inexistentes. En el centro de la roseta foliar aparecen las pequeñas flores, que aparecen a finales de verano (característica diferenciadora de M. autumnalis de M. officinarum, cuya floración es más temprana). Las flores son olorosas y de colores rosas y blancos. Cuenta con 5 estambres y tan solo un estilo. Su fruto es otoñal pequeño y redondo.

Distribución y hábitat: : Los estudios botánicos no han podido establecer si la distribución actual es fruto de la dispersión humana o la propia de la planta. M. officinarum se encuentra tierras bien drenadas en climas no demasiado calurosos, prefiriendo climas fríos, pues aguanta bien las heladas. En Europa su distribución silvestre es escasa, Italia y Yugoslavia. Aunque se considera que las variedades cultivables forman parte de esta especie. Al contrario M. autumnalis se extiende en Europa y Asia, siendo muy abundante en el mediterráneo, llegando a distribuirse por África. Resiste mejor el calor que M. officinarum, aunque su cultivo es mucho menos frecuente, pues es más peligrosa.

La ramificación de las raices de la mandrágora hace que pueda adoptar formas ligeramente humanoides.

La ramificación de las raices de la mandrágora hace que pueda adoptar formas ligeramente humanoides.

Interacción con el ser humano: La mandrágora es una planta de la que todas las partes son tóxicas, tanto las hojas, frutos, flores como y principalmente, la raíz. La toxina entra por contacto y puede llegar a causar la muerte. No se encuentra entre las plantas medicinales modernas, si bien la forma casi humana de su raíz le ha dado una fama, casi mística, razón por la cual ha estado presente en la medicina antigua. La planta contiene varios alcaloides, por lo que es narcótica y alucinógena, aunque la gran concentración de éstos en su raíz la hacen muy peligrosa. La intoxicación es frecuente con la sola manipulación, lo que posiblemente extendió la leyenda de que el grito de la mandrágora al sacarla de la tierra mataba a quien la arrancaba, aunque en realidad eran las toxinas de sus hojas que causaban mareos, vómitos y ocasionalmente la muerte.