La evolución convergente del té, el café y el guaraná, la cafeína
Ya hemos hablado alguna vez en Laguia2000 sobre la cafeína y su semejanza con la teína e incluso con la guaranina del guaraná que durante un tiempo se puso de moda en las bebidas azucaradas más juveniles. Estudios moleculares de laboratorio han demostrado que químicamente las 3 sustancias son en realidad la misma molécula, pero de forma tradicional se han separado, puesto que una viene de la planta del té, otra del fruto del guaraná y la otra de la planta del cafeto. La planta del té acumula teína, o cafeína, en sus hojas de tal manera que funciona como un insecticida. Así, cuando un insecto, normalmente una oruga, se empieza a comer una hoja de la planta del té, o un pulgón intenta succionar la savia de un tallo del té, toman cafeína. Esta sustancia les causa problemas digestivos, circulatorios y nerviosos, por lo que los insectos aprenden a no acercarse a las hojas del té.
Sin embargo, en los frutos del cafeto y del guaraná tiene otra función, completamente opuesta. Los herbívoros que se alimentan de estos frutos notan la aceleración de sus pulsaciones y sus receptores del cansancio (de la adenosina) se ven bloqueados por la cafeína, así que su cerebro no recibe señales de cansancio. Esto, evidentemente, les gusta a los animales, por lo que se vuelven adictos a comer de estos frutos, lo que en términos generales mejora las posibilidades de que las semillas de estos frutos se dispersen.
La cafeína es una molécula del grupo de las xantinas que tienen todas efectos similares, estimula el sistema nervioso central, causa vasodilatación del sistema circulatorio cerebral, aumenta el ritmo cardíaco, la cantidad de veces que el corazón late por minuto, estimula la contracción del músculo esquelético (los músculos con los que nos movemos) y relaja la musculatura lisa (las vísceras), lo que conlleva pérdida de apetito y relajación de intestino y vías urinarias. Finalmente, causa síndrome de abstinencia, es la necesidad del cuerpo de seguir consumiendo esa sustancia para mantener el equilibrio hormonal.
Evolutivamente, es raro que plantas muy separadas evolutivamente hayan convergido en la misma molécula química para conseguir una toxina y algo que atraiga a los polinizadores al mismo tiempo. Las 3 plantas, Camelia sinensis, planta del té, Paullinia cupana, guaraná, y Coffea arabica, cafeto, también se encuentran separadas geográficamente (Asia central, té, América del Sur, guaraná y Asia del sur y África tropical, cafeto).
Yendo a la filogenia, las 3 pertenecen a las auténticas plantas con flor. El cafeto (Orden Gentianales) y la planta del té (Orden Ericales) tienen una relación evolutiva más cercana (ambas forman parte de la subclase Asteridae) al igual que otras 80.000 plantas. La divergencia del grupo de las Asteráceas ocurrió en algún momento durante el final del cretácico, hace unos 60 millones de años posiblemente. Pero como ves, tienen miles de plantas evolutivamente más cercanas a cada una de ellas que no producen cafeína. Sin embargo, la separación de la planta de guaraná ocurrió mucho antes, en la diversificación de las Pentapetalea, en algún punto hace unos 100 millones de años, cuando se separaron las rosáceas y las asteráceas.
En cualquier caso, la evolución ha convergido en crear la cafeína. Así que tirando de falacia populista, 3 especies diferentes no pueden estar equivocadas al crear la cafeína.