Quienes son los Reptiles
Los reptiles son unos animales que causan una extraña fascinación al ser humano. Ya sea atracción, repulsión o miedo no dejan indiferente a nadie. Los reptiles son un grupo de seres vivos lo suficiente cercano a los mamíferos como para observar ciertas similitudes con ellos pero al mismo tiempo tienen unas diferencias abismales que impiden que exista el menor género de dudas a la hora de clasificar a un animal en uno u otro grupo. Las serpientes, las tortugas o los cocodrilos son los ejemplos más claros de reptiles. Sin embargo, evolutivamente los reptiles presentan varias controversias en la actualidad.
Filogenia e historia evolutiva: Los reptiles se clasifican en la actualidad en el clado monofilético de Sauropsida, taxón que comparte con las aves. Sin embargo, de forma tradicional esta clase de los tetrápodos se encontraba dividida y los reptiles se agrupaban en la clase Reptilia. Los saurópodos son uno de los grupos más extensos de la Tierra. La dominación durante 250 millones de años dejó un gran número de especies de reptiles que ahora conocemos como los dinosaurios. Los reptiles actuales son un grupo parafilético puesto que no incluye a sus descendientes evolutivos, mamíferos y aves. Dentro de la clase Sauropsida encontramos la subclase de Diasida donde se encuentran los ordenes de Sphenodon (grandes lagartos neozelandeses), Squamata que incluye los lagartos y las serpientes, la clase Testudines (tortugas) y finalmente el orden crocodilia, los cocodrilos, cuyos parientes evolutivos más cercanos son las aves (fósiles y actuales) y no ninguno de los otros grupos clásicos de reptiles.
Descripción física: Independientemente de su clasificación evolutiva algo confusa, los reptiles presentan una serie de caracteristicas comunes que han hecho que de forma tradicional se relacionase antes a los cocodrilos con las tortugas o los lagartos que con las águilas. Su característica principal y común son las escamas de queratina que recubren su cuerpo, permitiéndoles una vida más alejada del agua que la de sus antecesores evolutivos los anfibios. Sus huevos poseen amnios, la bolsa de agua en la que se gesta el embrión y la cáscara ha mejorado su resistencia a la pérdida de agua volviéndolos apenas permeables (esto de nuevo permite la vida más lejos del agua). Las fosas temporales situadas en la parte de atrás del cráneo han sido usadas como característica diferenciadora de los reptiles de forma tradicional. Sin embargo, en la actualidad se conocen otros seres vivos que los han desarrollado fuera del grupo y al mismo tiempo algunos de los reptiles (como las tortugas) los han perdido por completo. Su corazón por otra parte parece que se ha mantenido con tan solo tres cámaras en contraposición al corazón de mamíferos con cuatro. A este respecto hay que decir que aves y cocodrilos también presentan el corazón dividido en cuatro cámaras
Debido a su éxito evolutivo la morfología del grupo es muy variada. Los tamaños pueden ir desde varios centímetros hasta centenares de metros. En cuanto a alimentación o comportamiento los reptiles presentan un gran abanico de posibilidades. Normalmente usan la vista como fuente principal de información de su entorno, aunque el olfato puede estar bien desarrollado en algunos grupos como las serpientes. Los reptiles ponen los huevos en nidos y dependiendo de la especie les otorgan más o menos cuidados. Aunque no es frecuente que haya cuidado parental de las crías, algunas especies si interaccionan con sus crías que mucho antes de llegar a la edad adulta se independizan.
