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Ciervo europeo

Publicado por Ramón Contreras

Los ciervos son una de las especies más icónicas de Europa y Asia occidental. Tal vez su aparición en juego de Tronos como símbolo de la casa Baratheon le hayan dado un nuevo relieve, pero la verdad es que desde siempre se ha asociado con cierta majestuosidad. Por ejemplo en numerables historias japonesas el Señor del Bosque tiene un aspecto que recuerda claramente al ciervo, como es el caso de La princesa Mononoke. La cornamenta de los machos y su berrea la hacen un animal digno de admiración. Sin embargo, el ser humano que siempre ha gozado de cazar a este animal lo ha extendido por todo el mundo. Craso error, puesto que en la actualidad se encuentra en la lista de las 100 especies exóticas invasoras más peligrosas del mundo. Su introducción en otras regiones del globo ha dado lugar a grandes problemas ecológicos por la depredación de los ciervos sobre la vegetación.

Filogenia e historia evolutiva: El ciervo europeo, ciervo rojo o venado se denomina en biología Cervus elaphus es la especie tipo de un género con tan solo 3 especies. Al europeo la acompañan el ciervo canadiense C. canadiensis y el japonés C. nippon. Estas 3 especies muy relacionadas genéticamente aunque están muy dispersas forman una pequeña parte de la Familia taxonómica Cervidae (que cuenta con 20 géneros y 48 especies por todo el mundo). La especie cuenta con más de una docena de subespecies. El Orden de los Artiodactilos al que pertenecen (Artiodactyla) engloba a las especies que de forma común llamamos ungulados y se recoge en la Clase Mammalia, los mamíferos.

Descripción física: el ciervo común es de los ungulados terrestres más altos pudiendo alcanzar los dos metros y medio de longitud y más de 200 kilos en los mayos adultos. Ambos tienen el pelaje pardo y un rostro estilizado. Mientras que los machos tienen un pelaje más espeso en la zona del cuello y una característica cornamenta ramificada que cambian cada año y va creciendo con la edad, las hembras más menudas no desarrollan cuernos. Su alimentación es exclusivamente herbívora de hojas de árboles principalmente. Los machos berrean y pelean por las hembras en la época de celo. El ganador amasará un harén de hembras con sus crías que se dispersará acabado el periodo de reproducción. Las crías no desprenden ningún olor y se esconden en la maleza para evitar ser depredadas por felinos y cánidos, sus principales cazadores naturales.

Distribución y hábitat: El ciervo rojo es originario de Europa, Asia occidental hasta Nepal, China y Norte de África, aunque en los últimos siglos su población ha disminuido notablemente y ya no se encuentra en amplias regiones africanas, en los países de la antigua URSS y en China donde su presencia es casi testimonial. Vive, por lo tanto en climas templados desde la alta montaña hasta zonas boscosas. Las subespecies se consideran por el aislamiento genético que tienen, debido a la falta de corredores que tienen para conectar a la población de C. elaphus.

Interacción con el ser humano: El ser humano ha cazado ciervos desde tiempos prehistóricos. Dan buena cuenta de ello las pinturas rupestres en multitud de lugares del mundo. Además, el ser humano ha introducido a este ungulado en multitud de regiones precisamente por su resistencia al frío y su valor cinegético. Sin embargo, esto ha desembocado a que la UICN lo considere uno de los más peligrosos invasores ecológicos. Mientras que en su propio hábitat está protegido legalmente, aunque no se encuentra en peligro de extinción.