Clasificación biológica: Familia
Las familias taxonómicas son una de las clasificaciones en las que se pueden englobar los seres vivos. Las familias agrupan a los géneros de especies afines, por lo tanto los miembros de una familia suelen estar estrechamente relacionados. En biología la taxonomía sirve para clasificar a los seres vivos dependiendo de la semejanza con los otros seres vivos. De esta manera se establecen relaciones evolutivas que son mayores cuando más pequeño es el taxón común en el que se encuentran dos especies.
En la escala taxonómica las familias se agrupan en Órdenes, que es el clado superior. Todas las especies de una familia comparten un gran número de características morfológicas o genéticas. En ocasiones se pueden encontrar los clados superfamilia y subfamilia, aunque no se encuentran siempre. Las superfamilias agrupan diversas especies de un mismo orden que comparten características importantes y que no están presentes en otras familias del mismo Orden, de esta manera se establece que existe una relación más estrecha entre las familias de una misma superfamilia que entre dos familias del mismo Orden pero de diferentes superfamilias. Del mismo modo las subfamilias agrupan géneros cuya relación es más estrecha dentro de una misma familia.
En botánica se utiliza la terminación latina –aceae para designar a las familias y en castellano se convierte en –áceas. Como ejemplo la familia de las umbelíferas tiene por nombre científico Umbeliferaceae. Aunque no todos los grupos tienen una transcripción exacta, por ejemplo las leguminosas se agrupan en la familia taxonómica Fabaceae y en menor medida esta familia se denomina Leguminosae. De forma similar en la taxonomía zoológica la terminación latina es –idea, que con frecuencia se transforma en –idos un ejemplo de ello es la familia taxonómica de los Homínidos cuyo nombre científico es hominidae. Según el Código Internacional de nomenclatura actual los nombres de familia han de ser siempre plurales y comenzar por una letra mayúscula. Para formar el nombre de la familia debe tomarse el nombre de uno de los géneros que se piensa agrupar para formar con el genitivo latín el nombre de la familia.
El uso de este clado fue acuñado en primer lugar para la clasificación de las plantas. En 1689 aparece por primera vez en los estudios de P. Magnol en su obra Prodromus historiae generalis plantarum, in quo familiae plantarum per tabulas disponuntur. C. Linneo lo utiliza un siglo después para su clasificación natural, Philosophia botánica, aunque lo usa en la sección dedicada a la comparación morfológica de los órganos de las plantas para agrupar diferentes géneros. En el área de zoología es a finales del siglo XVIII cuando P. Latreille hace uso por primera vez del término como un taxón intermedio entre orden y género en su Précis des caractères génériques des insectes, disposés dans un ordre naturel . De este modo a principios del siglo XIX empieza a usarse de forma extendida en todos los tratados de biología que incluyen clasificaciones de los seres vivos. En el siglo XX la categoría de familia entra a formar parte del Código internacional de nomenclatura de zoológica y botánica (ICZN).