Tipos de camuflaje  

Coincidencia de fondo 

La mayoría de las personas asocian el camuflaje con la coloración y los patrones que se asemejan al entorno en el que se encuentra un animal. Esto significa que las presas o los depredadores a menudo pueden pasar por alto a un individuo, a menos que realicen una búsqueda exhaustiva. 

Muchas especies en hábitats frescos o estacionales tienen diferentes colores de verano e invierno para reflejar el entorno cambiante. Por ejemplo, la liebre con raquetas de nieve tiene pelaje blanco en invierno (como la nieve), pero tiene pelaje marrón en primavera y verano. 

Algunos animales llevan esta forma de camuflaje al extremo y pueden ser transparentes o semitransparentes, lo que les permite mezclarse con el fondo en diferentes hábitats o desde muchas perspectivas. 

Camuflaje disruptivo 

Una manera diferente en que el patrón y el color de un animal pueden ocultarlo de los depredadores, o permitirle engañar a la presa, es el camuflaje perturbador. Esta forma de camuflaje implica un patrón de manchas claras y oscuras, rayas o manchas, que a menudo parecen hacer que el individuo sea más obvio, no menos. Sin embargo, estos patrones pueden ayudar a alterar el contorno o la forma del animal, lo que puede evitar que un observador lo reconozca como una amenaza o un elemento de presa potencial.  

Mimetismo 

Otra forma para que un animal evite ser reconocido es imitar la apariencia de otro objeto o especie. Por ejemplo, muchos animales imitan la apariencia de material de fondo, como las hojas muertas. Un excelente ejemplo de este tipo de mimetismo es el gecko cola de hoja satánico. Otros animales imitan especies peligrosas, por ejemplo, la avispa mosca flotante se parece en apariencia a una avispa y el cuco puede imitar al gavilán euroasiático. Algunas especies incluso imitan el comportamiento y la apariencia. Por ejemplo, algunos insectos y mantis se balancean para parecerse a palos que se mueven en el viento, aunque este movimiento también puede ayudarles a ver la presa. 

Camuflaje adaptativo 

El camuflaje de fondo puede ser bastante restrictivo en algún momento. Por ejemplo, si un individuo se mueve de un hábitat a otro, puede que ya no se mezcle con el fondo. Algunas especies solucionan este problema con el camuflaje activo o adaptativo, cambiando su color, patrón, forma y textura en respuesta a su entorno y necesidades. 

Un ejemplo notable de camuflaje adaptativo es el camaleón, que puede cambiar su color de piel para mezclarse con su entorno. Otros animales, como el pulpo, pueden cambiar tanto su color como su textura para imitar a diferentes tipos de corales y rocas en su entorno. Este tipo de camuflaje es extremadamente útil en entornos dinámicos, donde los colores y las texturas pueden cambiar rápidamente.

Movimiento deslumbrante 

Un problema con muchos de los otros mecanismos de camuflaje es que una vez que un individuo se mueve se vuelve fácil de ver. Sin embargo, el movimiento de camuflaje deslumbrante, que utiliza patrones y rayas claros y oscuros, puede disfrazar la dirección, la velocidad o el tamaño de un animal en movimiento y ayudar a prevenir su captura.  

Este tipo de camuflaje es especialmente útil en animales que viven en grupos grandes, como los peces en bancos o las aves en bandadas, donde el movimiento deslumbrante puede confundir a los depredadores y hacer que sea difícil para ellos seleccionar a un individuo para atacar.

Contracoloración 

Una serie de especies usan la contracoloración como una forma de camuflaje, que generalmente implica que el animal es más oscuro en la parte superior y más pálido por debajo. Esto ayuda al animal a mezclarse con un fondo más oscuro como el suelo o el fondo del mar cuando se ve desde arriba, o para mezclarse con el cielo más claro y pálido cuando se ve desde abajo. 

Además de la contracoloración, algunos animales también utilizan la iridiscencia, que es la capacidad de cambiar de color dependiendo del ángulo desde el que se los ve. Esto puede ser especialmente útil en entornos acuáticos, donde la luz puede refractarse y cambiar de color a diferentes profundidades.