Sustancias que se transportan en el floema
El floema es el sistema circulatorio de los vegetales formado por vasos y capilares gracias al cual las plantas transportan las sustancias nutritivas que han sintetizado en la parte aérea, en las hojas, gracias a la fotosíntesis y se distribuyen al resto del organismo, principalmente a las raíces. Todas estas sustancias están disueltas en agua que ha sido captada por las raíces y ha subido por el xilema hasta las hojas y una parte de ella será usada para el transporte de nutrientes de vuelta hacia las raices.
Las sustancias que son transportadas por el floema en disolución acuosa reciben el nombre por extensión de floema y de manera más común de savia elaborada o descendente, en contraposición a la savia bruta o ascendente que transporta el xilema (el otro sistema de transporte de vasos de las plantas). En primer lugar y de forma mayoritaria el floema está constituido por agua. Si se elimina el agua de la savia elaborada obtenemos una materia seca que oscila dependiendo de la especie vegetal entre 50 y 300 gramos por cada litro de savia. El noventa por ciento de la materia seca del floema son azucares, concretamente sacarosa. La sacarosa es un disacárido (dos moléculas de azúcar enlazadas), puesto que los monosacáridos de glucosa y fructosa no se transportan se cree que debido a que son más reactivos y verían su transporte interrumpido al ser captados rápidamente. Una de las plantas con más contenido de sacarosa en su floema es la caña azucarera, y también la remolacha azucarera por supuesto. La sacarosa es el principal vehículo de energía entre las distintas regiones de la planta. La sacarosa será metabolizada para obtener energía por las raíces y otras regiones no productoras-fotosintéticas. Si bien la sacarosa es el principal azúcar algunas especies producen otros azucares en mucha menor cantidad como rafinosa (formada por una molécula de sacarosa unida a una galactosa), estaquinosa o alditol.
El resto de los compuestos transportados por el floema se encuentran en cantidades muy bajas. Sin embargo, dentro de ellos los más abundantes son los aminoácidos. El nitrógeno para sintetizarlos puede venir desde las raíces si la planta está asociada a microorganismos fijadores de nitrógeno que será transportado por el xilema en forma inorgánica u orgánica. Mientras que el nitrógeno que se capta por la respiración en las hojas es fijado y transportado exclusivamente en forma orgánica. Además, la planta puede querer movilizar nitrógeno desde las hojas a otros órganos (flores, semillas o frutos), antes de entrar en senescencia. Los más comunes en el floema son el glutamato y el aspartato, así como sus amidas (glutamina y asparragina).
Junto con estos compuestos pueden viajar compuestos no orgánicos que necesitan enviarse a otros tejidos. Entre los elementos más frecuentes están el potasio (siendo el más frecuente de todos los inorgánicos), el fósforo, el cloro y el magnesio.
Existen compuestos señalizadores que se transportan por el floema. Estos compuestos basta que se encuentren en muy bajas cantidades para que cumplan su función, gracias a ellos las distintas partes del individuo se mantienen en contacto. Las fitohormonas viajan por el floema para regular los procesos de crecimiento, defensa y desarrollo.
Finalmente existen otras sustancias que se han detectado en el floema, como son vitaminas, ácidos nucléicos (principalmente ARN), pequeñas moléculas de lípidos, ATP o metabolitos secundarios con funciones fungicidas o herbicidas.
Puedes leer más sobre la constitución celular del floema en el artículo que le dedicamos aquí y sobre el potencial hídrico necesario para que las sustancias suban por el floema en este artículo de aquí.