Estrategia de la r
La ecología estudia la relación de una especie con su entorno. Este estudio tiene que ser lo más complejo posible para permitir saber que ocurrirá a corto y largo plazo con una especie en concreto. Es por eso que la ecología intenta componer las ecuaciones matemáticas de las relaciones entre los seres vivos y su entorno.
Suponiendo que N es el número de individuos de una especie y que r es la tasa de crecimiento, la velocidad con que aumenta la población y k es la capacidad de carga del medio ambiente (una suma de factores tales como nutrientes, condiciones climáticas, etc.).
La tasa de crecimiento se calcula como la variación del número de individuos (delta N), entre el número de individuos de la población en un determinado momento. Cuando el N se aproxima a k los individuos, o las especies, deben competir por los recursos del medio. Frente a esta situación hay dos estrategias, la de la r y la de la k. Por lo que la estrategia de la “r” es una de las dos estrategias vitales que pueden adoptar los individuos de una especie con el fin de que la especie perdure en el tiempo, sin importar las muertes de los individuos individuales.
Las especies que han adoptado esta estrategia han optado por generar un gran número de descendientes por generación. Ésta reproducción muchas veces es única en toda la vida, puesto que sus vidas son cortas al estar controladas por la variación del clima circundante.
Estas especies suelen presentar individuos de pequeño tamaño: como bacterias, hongos, insectos hasta los conejos y todas las hierbas anuales. Estas especies suelen ser especies generalistas, tienen un rango de condiciones bastante laxo en el que pueden vivir. Es por esto que muchas veces son las especies colonizadoras, es decir, tienen una alta adaptabilidad. Estas especies son generalistas y por eso no suelen tener un sistema defensivo poco elaborado, por lo que su probabilidad de supervivencia es baja.
Cuando llegan a un nuevo ecosistema empiezan una reproducción exponencial que no se detiene nunca. En un campo sin cuidar crecerán muchas hierbas cada año cuando llega la primavera, sin importar que todas mueran en invierno, porque crecen siempre en condiciones de baja competencia, puesto que el ambiente es muy propicio para el crecimiento. Cuando las condiciones cambien los individuos morirán o se irán a otro territorio hasta que vuelvan las buenas condiciones. Estas especies tienen una alta tasa de migración, referida al movimiento de los individuos en busca de condiciones ambientales favorables, sin embargo, las especies de aves y mamíferos que migran no suelen ser de la estrategia de la r, puesto que el número de crías por camada o pollada es baja. Cada retoño recibe poca o ninguna atención de sus despreocupados progenitores dejando a su suerte la supervivencia de los nuevos individuos.
Lo normal es que las especies presenten estrategias intermedias entre la r y la k. Para saber más sobre las estrategias reproductoras o de supervivencia puedes ver el artículo que le dedicamos a la otra estrategia, la estrategia de la k, aquí.