Herencia de los Grupos Sanguíneos
Sistema MN
En 1927, Landsteiner y Levine descubrieron dos aglutinógenos en los hematíes humanos que fueron denominados M y N.
La producción de estos aglutinógenos está condicionada por un par de genes alelos:
- gen LM – condiciona la producción del aglutinógeno M;
- gen LN – condiciona la producción del aglutinógeno N.
Fenotipos y genotipos del sistema MN
Como entre LM y LN no existe dominante, podemos distinguir los siguientes fenotipos y genotipos para el sistema MN:
Fenotipos |
Genotipos |
Grupo M |
L M LM |
Grupo N |
L N L N |
Grupo MN |
L M LN |
Las transformaciones sanguíneas efectuadas con incompatibilidad entre grupos del sistema MN no ofrecen problemas, a no ser cuando ellas son repetidas muchas veces.
Sistema ABO
Volvamos entonces a considerar el sistema ABO. En la sangre humana, más específicamente en los hematíes, pueden ser encontradas dos proteínas denominadas aglutinógeno A y aglutinógeno B, responsables por la determinación del fenotipo sanguíneo. El plasma sanguíneo por su parte puede amparar otras dos proteínas denominadas a aglutininas anti-A y aglutininas anti-B.
Sucede que, en un individuo normal, no es posible la existencia de aglutinógenos y aglutinas del mismo nombre desde el momento que la aparición de ambas acarrea el desarrollo de reacciones del tipo antígeno X anticuerpo.
Entonces:
- Los individuos pertenecientes al grupo de sangre tipo AB poseen aglutinógenos A y aglutinógenos B, pero están desprovistos de cualquier aglutinina;
- Individuos portadores de sangre tipo A poseen aglutinógenos A y aglutininas anti-B;
- Individuos pertenecientes al grupo B poseen aglutinógenos B y aglutininas anti-A;
- Individuos del grupo O, finalmente poseen aglutininas anti-A y aglutininas anti-B, siendo por tanto desprovistos de cualquier aglutinógeno.
Donadores y receptores universales
Analizamos en esquema a continuación, mostrando las transfusiones posibles tomando en cuenta el sistema ABO
Observemos que el grupo sanguíneo O puede ser donado hacia todos los grupos existentes (O, A, B y AB), por ello, los individuos portadores de sangre O son llamados “donadores universales”.
Corresponde llamar la atención para el hecho de que el grupo O no puede recibir sangre de ningún otro grupo, solo puede recibir de su propio grupo, el O.
El grupo AB, por su parte, puede recibir sangre de cualquier otro; allí entonces es que se los denomina “receptores universales”.
Factor Rh
En 1940 Landsteiner y Wiener descubrieron otro sistema de grupos sanguíneos, a partir de la sangre de un mono Rhevus(Macaca mulatta). La sangre de este mono, luego de inyectado en cobayos o conejos, provocaba en esos animales la síntesis de anticuerpos que podían promover la aglutinación de la sangre donada.
Este hecho llevó a la conclusión de que la sangre del mono contenía un antígeno que fue denominado factor Rh, o factor de Rhesus. Los anticuerpos producidos por los animales receptores fueron denominados aglutinas antiRh.
El Rh+ y el Rh–
Los descubridores del factor Rh, extrajeron de cobayas y conejos sueros conteniendo aglutinas anti-Rh y enseguida las mezclaron con sangre de personas variadas. Constataron que en algunos casos, los hematíes se aglutinaban, indicando la presencia del factor Rh en la sangre humana, estas personas fueron denominadas Rh+. En otros casos, los hematíes no se aglutinaban, indicando la ausencia del factor Rh en la sangre y esas personas fueron denominadas Rh-.
Los individuos portadores de sangre Rh no poseen, normalmente, las aglutininas anti-Rh. Sin embargo cuando reciben sangre Rh+, se vuelven capaces de producir estas aglutinas. Como la producción de aglutinas sucede de forma relativamente lenta, al hacerse una transfusión de sangre de un donador Rh+ a un receptos Rh-, no debería ocurrir aglutinación de los hematíes donados.
Pero una segunda transfusión de sangre Rh podría provocar la aglutinación de los hematíes donados, al tiempo que las “nuevas” aglutininas producidas conjuntamente con las “antiguas” (resultantes de la primera transfusión), pueden elaborar una cantidad suficientemente alta para promover la aglutinación de los hematíes del donador.
En consecuencia de ello, los capilares sanguíneos del paciente pueden verse obstruidos y llevar al receptor a la muerte.