¿Qué son los hongos?

Los hongos son organismos eucariotas, talófitos y son clorofilas. La ciencia que los estudia se llama micología, y los micólogos suelen incluir a los hongos en el reino Mycete, aunque otras clasificaciones como las de Margulis los incluyen en los grupos Fungi y Protoctista. A nivel evolutivo es un grupo muy heterogéneo, con al menos tres líneas evolutivas distintas, no emparejadas filogenéticamente. No es un grupo muy bien conocido a nivel morfológico y filogenético, a pesar de su trascendencia económica y sanitaria. Junto a las angiospermas, es el grupo más abundante, ya que comprende más de 100.000 especies. Para estudiar su sistemática, se hacen tres divisiones en base a su tipo de nutrición y a la presencia o ausencia de células móviles en los ciclos de vida. Por otro lado, se usan las siguientes terminaciones de categorías taxonómicas:

– Mycota: división

– Mycotina: subdivisión

– Mycetes: clase

Se trata de organismos heterótrofos, con una dispersión muy eficaz por esporas, tanto aéreas como nadadoras. Tienen un cuerpo vegetativo generalmente formado por filamentos, con gran capacidad para el transporte interno.

Con repecto a la heterotrofía se distinguen dos grupos:

– Con fagocitosis o digestión interna.

– Con lisotrofía o digestión externa: excretan fermentos digestivos.

Los hongos que hacen fagocitosis no tienen pared celular, mientras que los hongos con lisotrofía tienen un cuerpo vegetativo filamentoso y pared celular. Además, los hongos pueden ser saprófitos, parásitos facultativos u obligados, simbiontes con algas (forman los líquenes) o con raíces de comrmofitas (micorrizas).

Entre sus características citológicas destaca el ser eucariotas y tener pared celular de quitina. Además, su composición es variable según el grupo.

Con respecto al aparato vegetativo, existe un grupo de hongos unicelulares que forman plasmodios con movimiento, generalmente, ameboide. El resto están formados por filamentos cilíndricos con crecimiento apical llamados hifas, y el conjunto de hifas recibe el nombre de micelio. Las hifas, a su vez, pueden presentar tabiques tranversales, recibiendo el nombre de hifas septadas. En muchos grupos estos tabiques tienen poros que permiten la comunicación entre los segmentos de las hifas. Por otro lado, existen las hifas sifonadas, que no tienen ni tabiques ni septos. También reciben el nombre de hifas cenicíticas.

En lo que se refiere al micelio, las hifas se pueden disponer de varias formas:

– Apretadas o enlazadas entre sí formando plecténquimas.

– Si no están entrelazadas se denominan prosénquimas.

– Si están muy entrelazadas, casi fusionadas, se denominan pseudoparénquimas.

En condiciones adversas, las hifas se pueden aglomerar formando estructuras específicas que pueden tener forma de cuerno: esclerocios, o estas cargados de sustancias de reserva: rizomorfos. En general, a las estructuras con hifas muy entrelazadas se les llama estromas. Por otro lado, las hifas pueden presentar estructuras especiales, por ejemplo los haustorios, nombre que se da a las hifas de los hongos parásitos.