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Tejidos del tubo digestivo

Publicado por Ramón Contreras

Desde la entrada hasta la salida el alimento es cortado mecánicamente y a nivel molecular y se separa de forma automática dentro del cuerpo aquellas sustancias que pasarán a formar parte del ser vivo de aquellas que serán eliminadas. En él intervienen varias decenas de tipos celulares que conforman suficientes tejidos distintos para llevar a cabo todo ello. Estos tejidos se distribuyen tanto de arriba abajo en el curso del alimento como desde la luz del tubo digestivo hacia “dentro” del ser vivo”. Para saber más sobre el proceso digestivo puedes ver nuestro artículo sobre la digestión aquí.

Veamos cuales son los tejidos que componen la pared del tubo digestivo, desde la luz del tubo (por donde va el alimento, hacia afuera):

Vemos teñidos los diferentes tejidos en este corte del tubo digestivo.

Vemos teñidos los diferentes tejidos en este corte del tubo digestivo.

El alimento recorre el cuerpo en contacto directo con una capa mucosa. Este tejido forma una membrana húmeda que tiene repliegues para aumentar la superficie de contacto y así aumentar la absorción de los alimentos. Este epitelio simple es escamoso no queratinizado y se encuentra en boca, faringe, esófago, estómago, intestino delgado, colon y conducto anal. Este epitelio esta soportado por una lamina basal bajo ella (una capa de matriz extracelular que separa los epitelios). En este tejido pueden aparecer glándulas de secreción tanto de mucosidad como de enzimas además de células especializadas en la absorción.

La siguiente capa que encontramos es la capa muscularis mucosae, una capa mixta de mucosa y de músculo liso muy fina, unitaria y laxa (las células musculares estás unidas por uniones tipo GAP) y entre ellas se encuentran las células mucosas. Su parte muscular está formada por haces musculares longitudinales y transversales entremezclados. Los haces musculares longitudinales se mueven de “detrás a delante” y los circulares realizan un movimiento de contracción, la mezcla de ambos es lo que permite el avance del bolo digestivo.

Siguiendo el sentido en el que los nutrientes son absorbidos nos encontramos la capa submucosa. Ésta está formada por tejido conjuntivo, fibroso y denso. Este tejido es la “argamasa” que une los diferentes tejidos que forman los órganos, por lo que siempre está altamente inervado y vascularizado. Además presenta prolongaciones de las glándulas mucosas de secreción externa y vasos linfáticos. Por este tejido es por el que llegan al tubo digestivo los impulsos nerviosos para mover el tubo digestivo y por él también se van los nutrientes que pasan al torrente sanguíneo y los desechos celulares que se eliminan hacia los vasos linfáticos.

A continuación está la capa muscular externa: que está compuesta por fibras de músculo liso unitario. Salvo en la boca y en la primera parte del esófago, que tiene musculatura estriada que es de movimiento voluntario para capacitar para la deglución.

Esta capa muscular es la encargada principal del movimiento, para ello consta de dos capas: una de musculatura circular interna cuyo movimiento de constricción hace avanzar el bolo y otra capa de músculo liso longitudinal externo que con su movimiento desplaza el alimento, peo además también los disgrega en zonas concretas para facilitar la absorción de nutrientes.

Por último nos encontramos una capa serosa. Está formada por una capa fina de tejido conjuntivo y otra de mucosa. Segrega un fluido acuoso para reducir la fricción interna de los órganos. Su vascularización lleva nutrientes a los tejidos del tubo digestivo .