Tejido epitelial
El tejido epitelial o epitelio es el encargado de recubrir todas las superficies del cuerpo de los animales, tanto externas, como en el interior de los órganos huecos. Esto incluye la piel de todos los animales, así como la capa celular exterior y la más interior de los conductos venosos, por ejemplo, o el intestino. En el hígado, cuya función es la filtración de sustancias de la sangre, el parénquima, el tejido que lleva a cabo el filtrado es de origen epitelial. Existen muchos tipos de epitelios y existen un buen número de tipos celulares especializados en este tipo de tejido, una mención especial de esta especialización son las glándulas de todos los órganos excretores que son especializaciones del tejido epitelial.
Según su origen embrionario el epitelio puede ser de cualquiera de las 3 capas embrionarias (endodermo, mesodermo y ectodermo). El ectodermo, la capa celular más exterior del embrión, dará lugar al tejido más grande del cuerpo, la piel. Así como al recubrimiento de los orificios naturales como la boca, el ano o las fosas nasales. La capa media embrionaria, el mesodermo, también dará lugar a tejidos epiteliales. En este caso será el epitelio de órganos internos de origen mesodérmico, como los riñones o los ovarios. Finalmente la capa más interior, el endodermo dará lugar al epitelio de los órganos del mismo origen como el tubo digestivo o el aparato respiratorio.
El epitelio es siempre la parte de un órgano que está expuesta al exterior o bien al rozamiento con otros órganos. Su función principal es evitar el deterioro de los órganos por la fricción mecánica, además esta capa celular sirve como primera barrera contra la infección. Para ello este tejido posee una de las tasas de reposición celular más elevadas, de forma que las células dañadas se desprenden y son repuestas por nuevas células que crecen debajo. Al ser la capa más exterior de los órganos el tejido epitelial debe estar bien cohesionado, sus células presentan gran cantidad de uniones entre ellas para evitar que los órganos se deformen, es por ello que presentan gran número de proteínas de unión.
Al ser el tejido que presentan los órganos al exterior éste deberá ser capaz de realizar todo tipo de intercambios con el exterior, tanto de información como de sustancias. Como ya hemos dicho muchas glándulas están formadas por este tipo de tejido, así que una de las funciones de este tejido es también sintetizar y secretar compuestos con diferentes objetivos, como la leche de los mamíferos o la secreción pancreática. Además de secretar sustancias al interior el epitelio está también capacitado para la absorción, como es el caso del epitelio intestinal. En el caso del epitelio del sistema respiratorio también cuenta con la función de transporte, puesto que es el movimiento de los cilios del epitelio el que mueve el moco que secreta para lubricar toda la vía respiratoria. Finalmente, el epitelio debe ser capaz de recibir y transmitir información del exterior, por lo que contará con terminaciones nerviosas, en 3 de los 5 sentidos (tacto, gusto y olfato).
Existen muchos tipos de epitelio según su organización histológica, puedes leer más sobre ellos en su artículo aquí.