Clasificación de los tricomas según su morfología
Los tricomas son las excreciones de la epidermis de los vegetales, que normalmente cubren la superficie de la planta, especialmente de las hojas. Puedes leer más sobre ellos en su articulo general aquí y sus funciones en el artículo que le dedicamos aquí (proximamente). Los tricomas poseen una gran diversidad morfológica, tanto es así que en muchas ocasiones son un carácter observable a la hora de clasificar taxonómicamente una planta. Esto hace que los tricomas se hayan clasificado dependiendo de su morfología en numerosas clases. Veamos las más importantes de ellas:
El tipo de tricoma más sencillo es el que está formado por una única célula de tipo epitelial y que se extiende en forma de pelo con un tamaño variable, que puede ir desde un simple abultamiento sobre la superficie de la epidermis hasta casi un algunos cientos de micras. Estos tricomas se denominan simples unicelulares. Durante el desarrollo del tricoma la célula que lo formará presenta todos los orgánulos celulares y está revestida de una cutícula y pared celular que secreta la propia célula. El núcleo se encuentra en la punta, desde la que el tricoma crece. Posteriormente el tricoma puede morir, dejando la estructura de la cutícula y la pared celular con funciones de protección o permanecer viva, en tal caso el núcleo se sitúa en la parte media del tricoma o en la base. El tipo más sencillo de tricoma pluricelular es el simple pluricelular. En este tipo de estructuras las células se encuentran una sobre otra, formando un pelo, en el que la primera célula se sitúa en la epidermis y las demás sobre ella sin ramificarse.
Existen los tricomas estrellados tanto unicelulares como pluricelulares. En ellos la célula o las células que lo forman mantienen su cuerpo celular insertado dentro de la epidermis, en cualquier caso desde la epidermis las células presentan ramificaciones, cortas, que se expanden en diferentes direcciones.
Un subtipo del tricoma estrellado se considera al vasculiforme, que en este caso son exclusivamente pluricelulares. En primer lugar cuentan con una célula en la epidermis que se prolonga hacia el exterior y de ella otras células se expanden alrededor formando una especie de parasol. Estos tricomas, presentes en el olivo, ayudan a mantener la humedad de la superficie de la hoja.
Otro tipo diferente de tricomas son los ramificados. Estos pueden ser tanto unicelulares como pluricelulares y se diferencian de los tricomas estrellados en que las ramificaciones del tricoma aparecen a diferentes alturas y pueden estar compuestas por una o varias células. Dentro de los tricomas ramificados encontramos los denominados tricomas en candelabro, debido a su forma, estás están compuesto siempre por más de una célula en ellos están presentes tanto ramificaciones a varios niveles como varias ramificaciones al mismo nivel, alejados de la superficie de la epidermis.
Finalmente los tricomas lanosos son un tipo de tricoma pluricelular. Estos tricomas están formados por un gran número de células que se disponen todas juntas para formar una estructura gruesa y sin ninguna ramificación. Las plantas que presentan estos tricomas en sus hojas suelen tener un tacto aterciopelado, puesto que siempre aparecen en gran número ocultando casi la superficie real de la hoja.