Biología

Lisosomas

Publicado por Ramón Contreras

Dentro de las células eucariotas podemos encontrar diferentes orgánulos que tienen funciones concretas. Tal vez los más conocidos son el núcleo, así como las mitocondrias, el retículo endoplasmático o el aparato de Golgi, debido a su intervención en la formación de proteínas. Sin embargo existen otros orgánulos indispensables para el funcionamiento de la célula, los liposomas son uno de ellos, su función principal es la digestión celular y gracias a ellos la célula descompone las moléculas complejas para generar sustratos para la formación de sus propias moléculas y la obtención de energía. Los lisosomas se han encontrado ampliamente en células animales, sin embargo, en vegetales no se ha demostrado su existencia.

Los lisosomas son una estructura membranosa de forma circular. Derivan del aparato de Golgi, por lo que cuentan con una membrana simple como otros compartimentos celulares. En el interior de la doble membrana se encuentran en disolución enzimas hidrolíticas y proteolíticas, que podrían deshacer la propia membrana del liposoma sin no estuviera protegida contra la acción enzimática. En los lisosomas se encuentran enzimas capaces de degradar todo tipo de compuestos, hidratos de carbono, lípidos, proteínas e incluso ácidos nucleicos. La composición enzimática de los lisosomas varía dependiendo del tejido en el que se encuentren y de la edad del mismo. Dentro del lisosoma las enzimas se encuentran en su forma inactiva y mediante las variaciones de pH causadas por el bombeo de protones a su interior por parte de la membrana cuando se incorporan otras vesículas con sustancias a degradar se activan. Los lisosomas tienen pues un pH diferente del citoplasma, tiene un pH inferior a 5.0.

Las enzimas son sintetizadas en el retículo endoplasmático rugoso y viajan por el Golgi mientras adoptan su conformación. En el Golgi se forman vesículas membranosas que se liberaran dando lugar a lisosomas. Las enzimas destinadas a los lisosomas cuentan con una manosa terminal, adquirida en el Golgi, que marca las proteínas para su viaje a los lisosomas.

Cuando los lisosomas se unen a otras vesículas que provienen de la endocitosis de moléculas exteriores o por la generación de vesículas para degradar estructuras internas, se denominan lisosomas secundarios. Si provienen del exterior se denominan fagolisosomas y si se fusionan con vesículas de origen interno autofagolisosomas. Cuando la célula entra en apoptosis las enzimas de los lisosomas salen al citoplasma deshaciendo las estructuras celulares eliminando a la célula.

Muchos tejidos renuevan sus células cada poco tiempo, por ejemplo en el hígado, un tejido con un metabolismo muy activo, los orgánulos encargados del metabolismo se vuelven a generar completamente cada 15 días. Cada célula digiere sus orgánulos paulatinamente a medida que envejecen y con las moléculas que recupera, en los lisosomas forma de nuevo las estructuras.