El papel de las bacterias en las caries
Las caries en los seres humanos afectan a más de la mitad de los niños de 3 años, poco después de la aparición de la dentición. Esta enfermedad que afecta a los dientes ocurre por un cúmulo de factores, entre los que se encuentran la dieta y la flora bacteriana propia de la boca de los seres humanos. Son varias las especies implicadas en la aparición de caries, más de una quincena. La mayoría de ellas pertenecen al género Streptococcus, hasta 6 especies de este género se han encontrado relacionadas. Puedes leer más sobre este género bacteriano de gran impacto en la vida del ser humano en su propio artículo aquí. El resto de bacterias pertenecen a diversos grupos tales como Eubacterium, Clostridium, Rothias, Actinomyces o Actinomyces, entre otros.
La principal especie que se ha asociado a la aparición de caries es Streptococcus mutans, también muy relacionada con otras patologías de la boca. Además de ésta especie encontramos a S. viridans las subespecies sobrinus y sanguis, S. mitis, S. oralis y S. salivarius (dentro de esta especie se encuentra una de las bacterias que se utilizan para la creación del yogur, S. salivarius subespecie thermophilus, aunque también conocida como, simplemente, S. thermophilus).
Estas bacterias tienen en común que son capaces de formar una película o biofilm sobre el esmalte, la capa más externa de los dientes, a este biofilm que se forma sobre los dientes lo llamamos placa dental. Para ello se aprovechan de las proteínas que han precipitado sobre la dentina tras la masticación. De esta manera, al embeberse en una biopelícula no son arrastradas por la saliva y permanecen en la boca. Estas bacterias son capaces de vivir en medios con pH ácido. Que muchas veces crean ellos mismos al degradar los azucares, de los hidratos de carbono de la dieta humana, en ácidos. Además de estas características son anaerobios facultativos, es decir, son capaces de vivir en una presión parcial de oxígeno baja, lo que les permite crecer aunque no estén al aire.
El esmalte dental es una capa sin células vivas. Con un 96% de hidroxiapatita, un compuesto inorgánico formado por cristales de fosfato cálcico, Ca5(PO4)3(OH). La dentina es la capa siguiente de los dientes y está compuesta en un 70% por hidroxiapatita. Esta capa ya contiene células en su base y pueden sentir. La hidroxiapatita se disuelve en ácidos, puesto que tanto el el fosfato (PO 43- como el OH– reaccionan con los protones, H+).
El biofilm sobre la dentina está compuesto tanto por bacterias GRAM positivas como GRAM negativas. Sin embargo, las GRAM positivas del biofilm no pueden vivir en las capas internas de la película, por la falta de aire. Esta condición permite la mayor proliferación de las GRAM negativas que hemos nombrado antes. Estas bacterias empiezan a formar ácidos como deshechos de su metabolismo. Para la formación de las caries se ha descrito que debe existir una colonización primaria de S. mutans subsp. Sangui. Al final los ácidos romperán las moléculas inorgánicas de la dentina, permitiendo a las bacterias introducirse cada vez más en el diente hasta alcanzar la pulpa e incluso el nervio, provocando cada vez mayor dolor de dientes.