Biología

Los virus

Publicado por Javier García Calleja

virusLos virus se detectaron por ser agentes causantes de enfermedades, capaces de atravesar membranas de filtración ultrafina; por ello se les llamó «»virus filtrantes». Esa expresión significa «veneno filtrante». Virus quiere decir «veneno».

Aunque se podían estudiar siguiendo técnicas de microbiología tradicional, por su pequeño tamaño sólo se pudieron observar cuando se desarrollaron los primeros microscopios electrónicos.

Los virus NO SON SERES VIVOS. No están formados por células, así que son, en esencia, moléculas de ácido nucleico envueltas en una cubierta proteica. Las cubiertas proteicas tienen una estructura geométrica que, aunque variable, sigue unas reglas de construcción simples y comunes para todos los virus.

En 1956 Crick y Watson sentaron las bases de la construcción de los virus: el ácido nucleico que contienen es tan pequeño que debe codificar una escasa cantidad de proteínas. La única manera razonable de construir un virus en estas condiciones consiste en utilizar una proteína vírica muy pequeña repetidamente en la construcción de la cápsida, como si fuera un ladrillo. Cada una de estas subunidades de proteína se llama capsómero.

La segunda aportación de estos investigadores fue considerar que para que los capsómeros se empaquetaran de una manera sencilla deberían hacerlo de modo simétrico. Así, se podría comprender la formación de las cápsidas siguiendo las leyes de la simetría en dos tipos: la simetría icosaédrica, para las cápsidas más o menos esféricas, y la simetría helicoidal, para las cápsidas de forma alargada.

En 1962 Caspar y Klug analizaron la formación de estructuras virales: los capsómeros se ensamblarían en un entorno cuasi-equivalente, y cada cápsida se definiría como una superficie de facetas triangulares que se pliega en el espacio. Las investigaciones del arquitecto Buckminster Fuller en la construcción de cúpulas geodésicas por el mismo procedimiento de triangulación permitió la colaboración de arquitectos y biólogos en el mismo tipo de proyectos de investigación.

Posteriormente, se han descubierto moléculas de carbono que tienen una estructura hueca, semejante a la de un balón de fútbol, y se les ha dado el nombre de fullerenos, en memoria del famoso arquitecto.

Ningún virus es capaz de replicarse autónomamente. Para ello, debe infectar una célula y utilizar la maquinaria enzimática de ésta para producir copias iguales al virus invasor. Desde este punto de vista, los virus son parásitos obligados, incapaces de multiplicarse libremente. Cuando un virus infecta una célula, utiliza toda la maquinaria celular en su multiplicación. En algunos casos, la célula no sufre un gran perjuicio, pero en la mayoría de los casos la célula muere a consecuencia de la infección, y los virus producidos salen en masa para infectar a las células vecinas. La mayor parte de los síntomas de una infección vírica reflejan los resultados de la lisis (destrucción) celular.

Atendiendo a su material hereditario, hay distintos tipos de virus. Cada uno sigue una estrategia de reproducción distinta en función de su material hereditario y del huésped al que parásita. Hay virus con ADN y virus con ARN. En cada caso la molécula puede ser de cadena sencilla o de cadena doble. A veces es lineal y en otras especies es circular.

Cada virus tiene una gran especificidad de huésped, es decir, sólo es capaz de infectar un tipo específico de células, incluso, dentro del mismo huésped. Así, el virus de la hepatitis infecta preferentemente a los hepatocitos humanos; el virus VIH sólo infecta a los linfocitos T4 del hombre y del mono verde africano; el virus de la peste porcina africana sólo infecta a los macrófagos de cerdo; el bacteriófago cf-29 infecta a la bacteria Bacillus subtilis, pero no infecta a Escherichia coli; y el virus del mosai¬co del tabaco sólo infecta a las hojas de este vegetal.

Microfotografía del mortal virus Ébola

Microfotografía del mortal virus Ébola