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El proceso de respiración en los animales

Publicado por Pablo Morales

Si nos fijamos en el interior de la célula viva nos damos cuenta que se trata de un chip de experimentos de reacciones químicas. Estas reacciones químicas dependen de la temperatura, o la energía. Esta energía proviene de la descomposición de ATP (trifosfato de adenosina). ¿Quién produce o ensambla la ATP?

Ahora es importante dilucidar la importancia de la respiración, como es la oxidación de hidrógeno en el ciclo de Krebs, donde la glucosa se descompone para formar agua y dióxido de carbono, que promueven la formación de ATP.

Es decir, no hay energía sin respiración celular. Esta reacción química donde las moléculas de oxígeno están desaparecidas, y que están entrando en la respiración de oxígeno adicional para los seres.

Durante la evolución de las especies animales, tales como aparatos de respiración se han desarrollado branquias, la respiración de la piel y la respiración celular. Incluso hoy en día, en el embrión, podemos encontrar restos de las branquias en el mamífero mismo.

Este permite el intercambio de gases entre la sangre y el líquido directamente, mientras que la respiración celular requiere un sistema tubular, donde el aire debe ser presentado cerca de la sangre. Este aparato se conforma como alveolos respiratorios en ciernes en la faringe.

Así que lo que sale de la cúpula del diafragma en el pecho aparece creando un vacío en la cavidad torácica, donde se encuentra el alojamiento de los pulmones. No hay una estructura para sostener y promover la expansión de los pulmones, sólo el propio vacío.

El traslado incluye el aire que pasa por la nariz, la cavidad nasal en el que habrá una adaptación del aire, los tubos hacia el interior donde se encuentran los capilares.

Purificación de aire

El aire de una manera que sea, puede causar daño al cuerpo, cómo generar una neumonía, una membrana mucosa seca, o permitir el acceso de los contaminantes en el ambiente. Para que suceda esta purificación del aire, hay tres estados como requisitos previos: la filtración, humidificación y calefacción.

Cavidad nasal

Para filtrar el aire, las fosas nasales ubicadas al comienzo de la cavidad nasal, presentan pelos que hacen de filtro inicial. Esta región se llama el vestíbulo nasal y estos vellos forman una red que detiene a las partículas más grandes de polvo. En la planta del vestíbulo nasal, se encuentra un agujero, llamado orificio nasal en conexión con el conducto naso-lagrimal. Las lágrimas producidas, desembocan en el vestíbulo nasal, y por lo tanto, todo el aire inspirado promueve la pulverización de lágrima.

Así comienza la humidificación del aire. Luego nos encontramos con la cavidad nasal en sí, donde un hueso delgado cubierto con un rico plexo venoso (vasos sanguíneos) y la mucosa, forma un remolino de aire que es inspirado. Estas estructuras se llaman cornetes.

Aquí se calienta el aire inspirado a través del plexo venoso y lo humedecen a través de su mucosa húmeda constantemente. Esta humedad actúa como un pegamento para partículas pequeñas, las bacterias, los virus que llegan a ser inhalados. Esta fortaleza genera turbulencia con todo el aire de chocar con las paredes, por lo tanto la adecuación de aire se ha completado. El espacio a través de la cual el aire va a pasar, delimitado por los cornetes es llamado meato nasal.